viernes, 2 de noviembre de 2007

Revista Destiempos


Hace mucho tiempo no publicaba nada digno; bueno, nada. Éste es un artículo inspirado en la colección de pintura que cada sábado, desde hace tres años, los padres de la Congregación del Oratorio de San Felipe Neri de México han tenido a bien permitirme explicar al público incauto que llega a la sacristía.
Espero que les guste, o disguste, pero que lo lean y comenten.
Saludos, Alejandro.
http://www.destiempos.com/n11/alejandrohernandez.htm

jueves, 4 de enero de 2007

Templo de la Profesa






Ubicado en el corazón de la ciudad de México, el templo de la ex Casa Profesa de la Compañía de Jesús en México, ahora sede de la Congregación del Oratorio de San Felipe Neri de México, ofrece un servicio único en su género. La exhibición de 370 obras pictóricas que conjugan lo mejor del arte de San Lucas en 5 salas. Una colección de pinturas, escultras y artes aplicadas que ofrecen un panorama único de la Historia del Arte Mexicano, la historia de la Compañía de Jesús en la ciudad y el virreinato de la Nueva España, así como el recuento de los años y devenires que el Oratorio de San Felipe Neri de México ha vivido dentro de esta majestuosa ciudad de los Palacios. El conjunto comenzó a edificarse para 1590, en terrenos donados por Alonso de Villaseca, y el primer templo se dedicó el 31 de julio de 1610, para la beatificación de San Ignacio de Loyola. El segundo templo fué reedificado para 1720, obra de Pedro de Arritea y dineros de la Marquesa de las Torres de Rada.

La Casa Profesa abracaba tres patios, portería, planta baja y alta, y accesorias. Fué escenario de grandes momentos de la ciudad y el virreinato, hasta que en junio de 1767 fueron expulsados los regulares de la Compañía por órdenes que obraban en el real pecho de Carlos III. Para 1768 los sacerdotes de la Congregación filipense oficiaban misa en el recinto, y solicitaron el espacio en permuta por sus casas arruinadas en un reciente sismo. Ocuparon el espacio para el siguiente año y en 1846, los oratorianos tienen que desmantelar y arrumbar la impresionante colección de objetos sunturaios y artísticos pues el Ayuntamiento decidió demoler las casa que se interponían entre el callejón de la Alcaicería y el Teatro Nacional, incluyendo la mutilación brutal del edificio. Para ese entonces, ya Manuel Tolsá había redecorado y redistribuido templo y casa, dando aires neoclásicos a la iglesia y separó casa de congregantes y casa de ejercicios espirituales para varones. La casa fue dividida, fraccionada, demolida y desapareció. Lo que quedó fue una serie de estrechos salones donados por don Tomás Gillow a la Congregación y ahí habitaron, entre cientos de pinturas y objetos arrumbados. Hace 40 años, por iniciativa del RP Luis Ávila Blancas se inició la actividad educativa y cultural de la Pinacoteca de la Profesa, que cada sábado recibe a los interesados y paseantes. Se ofrecen visitas guiadas por el acervo, que incluye piezas del siglo XVII y XVIII con firmas como Cristóbal de Villalpando, Juan Correa, Baltasar de Échave Orio, José Juárez, Miguel Cabrera, Alonso Herrera, Antonio de Torres, Juan Salguero, Tomás Conrado, José y Nicolás Rodríguez Juárez. Y en el siglo XIX, Pelegrín Clavé, Salomé y Piña y varios pintores de la Academia de San Carlos.

Cuenta con las salas "Mariana", "Compañía de Jesús", "Cardenal Newman CO", "Tres siglos" e "Historia bíblica". La entrada es gratuita.